domingo, abril 01, 2007

Mas extraño que la ficción, pero mucho mejor que la realidad

Por fin he visto más de dos películas seguidas buenas, cosa que hace tiempo que no me ocurría. Y precisamente he visto las dos películas maltratadas en las nominaciones a la última edición de los oscars (Menuda mierda de gala, de premios, incluso de vestidos de las nominadas/invitadas). Las dos películas a las que me refiero son Más Extraño que la Ficcíón y Bobby. Y voy a comentarlas, comenzando por la de Will Ferrell (debido a que la ví primero).

Al principio, antes de sentarme a verla, no sabía que me iba a encontrar, pues del director Marc Forster (Tránsito, Descubriendo Nunca Jamás, Monster's Ball y alguna más abarcan su filmografía) o te gustan (en mi caso DNJ o Monter's Ball) o las detestas (Tránsito), pero casí todas tienen un patrón común: Los guiones de sus películas unen la realidad y la ficción, sus imagénes se mueven por dos mundos a la vez, y al final suelen juntarse en una perfecta armonía. Para que sepais un poco de que va la película, echad un vistazo a su sipnosis: Una novelista (Emma Thompson) está intentando acabar su última -y posiblemente mejor- obra. Sólo hay un problema: tiene que encontrar un modo de matar a su personaje principal (Will Ferrell). ¿Que cual es el problema? Pues que el personaje principal... existe en el mundo real.
(FILMAFFINITY)
Al leer esto, y juntando a Will Ferrell (cuya filmografía son todas comedías típicas Made in USA, aunque alguna diferente a lo que solemos ver) no tenía yo muy claro lo que me iba a encontrar. Por eso me gusto muchísimo más de lo que esperaba. Y por eso es una injusticia lo que han hecho con ella en los Oscar.

El director consigue hacer algo que a priori parece muy difícil, conseguir que nos creamos TODA la historia. El guión de Zach Helm es uno de los más originales de los últimos años, con un intento de acercarse a los guiones de Charlie Kaufman, pero que va un poco más allá y consigue que nos creamos todo lo que ocurre (aunque siempre quieras que Harold se despierte y que sea todo un sueño muy profundo). La dirección está muy cuidada, y con unos planos estéticamente correctos, y unos actores en un estado de gracia permanente.

En cuanto a la parte actoral, debemos darle un premio desde ya a Will Ferrell y a Emma Thompson (sobre todo a ella), pues sus personajes tan raros son muy, muy creíbles, y eso es mucho logro. Will sencillamente, se sale. Es un hombre atrapado en algo que no sabe que es y que poco a poco va desestabilizando su ordenado y perfecto mundo. Su comportamiento se va transformando poco a poco. Emma esta encantadora, espléndida, genial... Todo es poco para describir su papel de escritora algo "loca" que quiere acabar su libro. Creo que la actuación de la inglesa merecía una nominación. También hay una mención especial para Maggie Gyllenhaal, que está perfecta en su papel. No es una de las chicas bombón de Hollywood, pero sus actuaciones hacen que te creas todo lo que le echen. Sus escenas con el personaje de Ferrell, son enternecedoras y graciosas. Por otro lado están Dustin Hoffman, que es un profesor de literatura, y cumple con su papel, al igual que Queen Latifah que realiza un papel pequeño, pero
bien hecho.
(ATENCIÓN SPOILER) El único "pero" real que se le puede reprochar a la película es su final, que es demasiado convencional.
Lo mejor: Los actores, la dirección, el guión.

Lo peor: El final.

La escena: Dos. La primera, cuando Hilbert (Hoffman) le dice a Harold lo que opina del libro después de leerlo. La segunda, la escena con la música de Vangelis ‘La Petite Fille de la Mer’, una delicia músical.

Nota final: 8,5

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