Hoy no estoy feliz. Simplemente, me siento engañado. Espero equivocarme, pero debo estar tristemente acertado. Aquellos que no hace mucho me daban leves golpecitos en la espalda y abrazos mimosos (a un servidor le gusta el calor humano, cosa que hoy en día brilla por su ausencia, ahora somos más del "Aquí te pillo, aquí te mato"), hoy no son mas que un espectro que sólo noto que están cerca de mí por vacias conversaciones a través de frases ridículas e innecesarias.
Simplemente os echo de menos. Si algún día volveís a acordaros de mí, avisadme.
¡Un abrazo a todos!
Simplemente os echo de menos. Si algún día volveís a acordaros de mí, avisadme.
¡Un abrazo a todos!
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